La caída de un héroe

¿Tú también tienes un héroe en tu vida? 

Sí, un héroe, estoy segura que me entiendes y que tu también lo tienes. Esa persona, que puede ser tu padre, tu hermano mayor, tu madre, tu tío o tu abuelo, esa persona que tu sabes que es genial, que admiras, que amas y que consideras tu lugar seguro, esa persona que sabes que bajo ningún motivo podría lastimarte; la única con la que estás segura, jamás podría romperte el corazón. 

¿Lo tienes? 

Yo también. 

¿Pero no te pasa que quizá tu héroe es o fue el villano en la historia de alguien más?

A veces, si es que te pasa, lo que piensas es que quien era el villano, ha cambiado, ha madurado y ha decidido ser una mejor persona, alguien cariñoso y capaz de quererte y protegerte de todo y de todos. Quizá pienses, quién fue tu padre no es mi abuelo, por qué ha cambiado, por que a mi no me trata como a ti y por que sería incapaz de lastimarme, incluso puede que pienses que ha cambiado gracias a ti. 

Puede que como tu héroe fue villano en el pasado, has crecido escuchando las historias de terror donde él era el protagonista y no puedes creerlo, sencillamente en tu cabeza no puede ver a esa persona que te describen como la misma que hoy es tu héroe, es que no lo es, ya no es así, ha cambiado. 

Quizá el resto de las personas no conciban la forma en que es contigo, no acaban de creerse que ha cambiado y tu lo defiendes, siempre, con uñas y dientes por que es tú héroe. Y un héroe aunque no es perfecto, merece ser defendido, querido y admirado. 

Pero, ¿y si después de todo el villano solo llevaba una máscara de héroe? 

No, eso jamás podría pasar, no podría lastimarte nunca. 

Pero lo hizo, te rompió el corazón como solo el amor más grande de tu vida podría hacerlo. 

¿Duele? 

Sí, duele mucho. 

Pero duele más, ver cómo todos a tu alrededor lo sabían, incluso lo esperaban. Trataron de advertirte pero no podías ni querías creerlo, no de él, no de los brazos a los que siempre sabías que podías correr, no del abrazo que siempre sentías seguro, pero tenían razón y se te rompió el corazón.

A vá menos fuertes, un poco nuevos y quizá inesperados, pero esos, esos héroes que llegan sin capa, sin proclamar ser buenos, esos son los héroes que realmente lo son. 

Gracias al cielo al final perdí uno pero gané más de tres. 

Y a ti, ¿también tu héroe se ha convertido en villano?